sábado, 17 de marzo de 2018

Reflexiones de un Escritor Acerca de la Escritura

¡Buenos días, Clan! Hace siglos que no hago un post e, independientemente del número de vosotros que me leáis, me apetecía tanto escribir que no he resistido la tentación.

¿Sabéis lo sano y terapéutico que es escribir? Yo, que debo confesarme adicto a los libros de autoayuda, es algo que no dejo de verlo aconsejado en miles: "Escribe todos los días unas páginas".

Y he experimentado en mis propios huesos sus efectos beneficiosos (desde los 14-15 años he tenido diario, que nunca he interrumpido más de 1 mes) y el bajón de cuando dejas de hacerlo.

Os cuento: yo escribía con mucha asiduidad en el diario (a Dios, a mi yo futuro, a mi yo pasado, a nadie, al diario en sí, a gente a la que no me atreviera a decirles las cosas) y me servía para aclarar las ideas, para reflexionar sobre cuestiones de mi vida, no sé... de verdad que siempre me ha parecido super beneficioso.
Hace como 4-5 años (ay, no sé: tendría que mirarlo) me puse a lleno con la escritura-corrección de mi primera novela "La Embarazada-Espía" así que toda mi energía escritora se iba principalmente hacia el libro. Aunque disminuyó mucho lo que es el diario, tampoco había problema, ya se encargaba el subconsciente de ir vaciándose de problemas en la trama, personajes y frases de "La Embarazada-Espía", además, como sabéis que está escrito en tono humorístico, era una liberación magnífica igualmente (NOTA: hasta la décimo cuarta revisión: a partir de ahí fue un suplicio, para qué vamos a negarlo!).
El problema fue que perdí el hábito de escribir en el diario y, al acabar por fin el libro, dejé de escribir totalmente.
Sabéis (u os cuento, que tampoco pasa nada) que yo fundamentalmente soy cantautor (o eso llevo diciendo todos estos años) y resulta que mi principal proyecto de música también se acabó (como dijo Rocío Jurado "se nos rompió el amor de tanto usarlo") así que, Clan, ¡me quedé huérfano! De verdad que esa fue mi sensación: ¿y cómo me liberaba? Sin música y sin escritura: muy duro.

He ido recuperando ambas cosas, muy tímidamente, pero gracias a esa pérdida me he dado cuenta de lo tremendamente necesarias que son estas dos cosas para mí (que sí, que lo tenía que saber antes de esto, pero ha sido un recordatorio buenísimo).

Y hace relativamente poco, surgió "Un Vuelo Que Coger". Otro proyecto escrito (porque no sé si llamarlo novela, ya sabéis lo que me gusta crear e innovar y no sé qué formato exacto tendrá). El caso es que es verdad que se agradece volver a tener una excusa por la que escribir.
¡Pero estoy oxidado! Si yo me siento (¡¡mirad lo que estoy liando en un momento!!) pero me tengo que sentar. Tengo que reservar ese tiempo, y me resulta difícil.

Buena, ea, se acabó! (o mejor cambio de post porque yo creo que hasta aquí ya es difícil que me lea nadie!!)
Cuidaros muchísimo y sed buenos!! Nos vemos Clan!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario